Otra vez sentada en la misma mesa, en el Villamar….
con mi botella verde…
Una nueva cosecha, culines de mar cantábrico
Impregnando el paladar de sabor a tierra asturiana
mi tierra….
Refugio de mis horas bajas, remanso de silencios buscados
Verde cobijo de húmedas memorias…
Recuerdos de trenzas largas, sueños dorados
Virginidades mentales que no volveré a catar.
Es un apego innato..un saber sin saber por qué
Regreso una y otra vez a las mismas calellas,
Al pico para ver el Castro
Y observo las gaviotas, otras nuevas….
haciendo guardia al viento…..