Romero y Jara
esparcen su aroma
al viento
El aire,
Limpio de pensamiento
Deseo o duda
Juega con los pajaros
Y suena el otoño a lo lejos
recordándome el tiempo
que gobierna la vida...
Prefiero el eterno silencio
y la dicha del vacío
que el anhelo constante
marcado por la urgencia
y los sentidos
La piel va madurando
y la mirada, más calma,
ya no se posa en cualquier sitio
como antaño...
Vaga, oteando
un horizonte difuso
y de vez en cuando
descansa en el límpido azul
ya desprovisto de nubes
Intuyendo el corazón
su origen, en el eco
de lo inefable